El antirreflejante mejora la visión al reducir los reflejos en la superficie de los lentes, lo que permite ver con mayor claridad y nitidez. Es especialmente útil para manejar de noche y trabajar frente a pantallas, ya que disminuye el deslumbramiento y la fatiga ocular.
Los lentes fotocromáticos se adaptan automáticamente a los cambios de luz, oscureciéndose al exponerse al sol y aclarándose en interiores. Esto proporciona comodidad al evitar la necesidad de cambiar entre lentes de sol y graduados. Además, protegen los ojos de los rayos UV, reduciendo el riesgo de fatiga ocular y daño a largo plazo.
Los lentes polarizados eliminan los reflejos intensos de superficies como agua, vidrio y asfalto, proporcionando una visión más clara y cómoda. Son ideales para manejar, pescar, hacer deportes al aire libre y cualquier actividad en entornos muy luminosos.
Los lentes con filtro Blue Ray o filtro de luz azul están diseñados para reducir la exposición a la luz azul emitida por pantallas de computadoras, celulares y otros dispositivos digitales. Ayudan a disminuir la fatiga ocular, el cansancio visual y los posibles trastornos del sueño causados por el uso prolongado de pantallas. También pueden mejorar el confort visual y reducir el deslumbramiento, especialmente en personas que pasan muchas horas frente a dispositivos electrónicos.
Altamente resistentes a los impactos, lo que los hace ideales para niños, deportistas y personas con actividades dinámicas. Son más ligeros que otros materiales, lo que proporciona mayor comodidad al usarlos por largos periodos. Además, cuentan con protección UV incorporada, ayudando a proteger los ojos de los daños causados por el sol. Gracias a su durabilidad y seguridad, son una excelente opción para lentes oftálmicos y de sol.
Los lentes de alto índice (Hi-Index) son más delgados y livianos que los lentes estándar debido a su capacidad para doblar la luz de manera más eficiente. La elección entre lentes depende de tu receta y estilo de vida. Al leer tu receta, ten en cuenta que el valor SPH indica la cantidad de potencia prescrita para corregir la miopía (-) o hipermetropía (+). El valor CYL, que no siempre aparece en las recetas, indica la potencia necesaria para corregir el astigmatismo.
La tecnología Fusión consiste en un proceso óptico avanzado orientado a mejorar la estética de los lentes, mediante la reducción del espesor sin comprometer la calidad visual. Esta técnica es especialmente útil en prescripciones medias a altas, donde el grosor del lente puede ser notable.
Este tipo de optimización es ideal para usuarios con prescripciones entre 4 y 8 dioptrías, ya que mejora el confort, la apariencia y la ligereza del lente, haciendo que se adapten mejor al rostro y a distintos tipos de armazones.